jueves, 17 de abril de 2008

ODIO

Odio madrugar.
Odio trabajar en algo en lo que no exploto mi talento.
Odio los frikis soplapollas y aburridos que nos invaden con canciones cutres.
Odio los macarras.
Odio sentirme censurada y no poder decir lo que me de la gana.
Odio la gente que intenta manipularme.
Odio el chantaje emocional.
Odio a ciertos miembros de mi familia.
Odio los metementodo que juran tener la panacea para arreglar mi vida y que sólo son unos mamones aburridos de vivir la suya.
Odio ser políticamente correcta.
Odio a los programadores y aún más a los contraprogramadores.
Odio ver llorar a un hombre.
Odio la gente con aires de superioridad.
Odio... Hoy odio profunda e intensamente.

4 comentarios:

EL CHICO GRIS dijo...

El odio conduce al sufrimiento, el sufrimiento es el lado oscuro de la fuerza, pequeña pádawan.

Alegoria dijo...

Galmaran, a tí también te odio.

Anónimo dijo...

Hija mia, todos tenemos días de esos... lo malo es cuando comienzan a ser mayoría.
Ánimo, yo me centro en quu el fin de semana está aquí.

Anónimo dijo...

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